Me gusta subir al techo de mi casa, en esas noches largas, para contemplar las estrellas que aunque lo parezcan no son eternas, y pensar en todo lo sucedido en el día, pero lamentablemente lo único que inunda mis pensamientos eres tú. ¿Cómo pensar en algo más? es casi imposible porque en el día me la paso perdida en otros lugares en donde no estas pero por la noche es como si quisieras recuperar todo ese tiempo y te metes en mi cabeza, te metes tanto en mi...
Entonces suspiro porque tu eres el sol, yo soy un mundo desconocido y la órbita en la que gira alrededor de ti; mi amor.
Es extraño porque tu no lo sabes y la verdad, me da miedo decírtelo, pero aun así sigo sonriendo con aquellos pequeños gestos que haces, sin embargo a veces, en esas noches largas, desearía que pudiera provocar algo en ti, hacerte temblar ante mi presencia, mirar como tus mejillas se tornaran rojas... me gustaría ser alguien importante para ti aunque solo sea en esas noches de estrellas efímeras.
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